En el marco de la nueva normalidad, el 29 de junio se completan las clases presenciales en todas las escuelas públicas del país. Entorno a las escuelas se teje un gran entramado social que atraviesa los ámbitos sanitarios, laborales y económicos. La vuelta de niñas y niños al aula presencial implica la reorganización familiar, ya que el tiempo que están en la escuela es parte del sistema de cuidado de muchas familias.
La limpieza de los locales escolares ha sido siempre tema de permanente preocupación y ocupación por parte de direcciones, docentes y comunidades de madres y padres. Históricamente, ha sido un reclamo por mejorar la relación de auxiliares de servicio por cantidad de estudiantado. Existen escuelas que cuentan con una sola auxiliar de servicio para 500 niños. El CEIP envía magras partidas para la compra de materiales de limpieza. A modo de ejemplo, las escuelas de práctica reciben la suma de $1800 cada 2 meses. Así como existen escuelas que se hacen cargo de la compra de estos insumos y el contrato del servicio de limpieza por Comisión Fomento. Es decir, financiados con el aporte que las familias hacemos mes a mes al centro escolar.
Hoy cobra relevancia pública el mantenimiento estricto de los centros educativos de acuerdo a los protocolos, lo que hace necesario garantizar los recursos para hacerlo posible y así controlar los contagios por Covid 19. En esta nueva coyuntura, el aporte en las escuelas ha descendido ya que muchísimas familias se han visto afectadas económicamente por el desempleo y seguros de paro. Esto hace que en algunos centros, las comunidades ya no podrán hacerse cargo de esos servicios. Además, la matrícula se ha visto incrementada. Muchas de esas familias han optado por pasar a sus hijos desde centros de enseñanza privada.
Este nuevo escenario alerta un tratamiento presupuestal distinto para la Escuela Pública. Aumento de matrícula, limitaciones en sus recursos para cubrir cargos de auxiliares, familias con impactos por la crisis económica, probable aumento de comensales en los comedores. Estos factores demandarán mayores asignaciones presupuestales. Montevideo, 20 de junio de 2020
2020-06-20 - Comunicado sobre regreso a la presencialidad.pdf