El colectivo de familias organizadas que integran los espacios de Comisión Fomento Escolar y los Consejos de Participación de la Escuela Pública, comunican:
El 25 de mayo del corriente, nos reunimos en la Sala del Teatro de la Escuela Experimental de Malvín, las familias que participamos de forma organizada en los espacios de Comisión Fomento y los Consejos de Participación. El encuentro convocó a 14 escuelas de Montevideo y Canelones de las zonas de Punta Carretas, Jacinto Vera, Reducto, Pocitos, Atahualpa, La Comercial, La Blanqueada, Punta Gorda, Carrasco, Malvín, Shangrilá.
La escuela pública está en el campo de lo público, del interés común. Nos ocupamos de ella como parte de la sociedad, sentimos que es nuestra responsabilidad también, nutrirla, sostenerla y fortalecerla. Somos otras voces que buscan converger en la construcción de un espacio común. Nos reconocemos como un actor más, que juntamente con el colectivo docente, los niños y las niñas y las direcciones, formamos parte de la comunidad educativa. Somos ciudadanas y ciudadanos organizados que queremos participar, contribuir e incidir en el fortalecimiento de la Escuela Pública.
La Ley General de Educación Nº 18.437 del año 2008 establece como uno de sus principios fundamentales el derecho a la participación de estudiantes y familias. Para ello crea la figura del Consejo de Participación que funcionará en todas las escuelas, integrado por estudiantes, docentes, madres, padres o responsables y representantes de la comunidad con la competencia de presentación de propuestas de diversa índole, incluidas las relativas al proyecto educativo.
En el reglamento de Consejos de Participación que aprueba el Consejo de Educación Inicial y Primaria, se contempla la articulación con la Comisión Fomento Escolar a través de la dirección y la presidencia de esta última, estableciéndose plazos para su integración. Sin embargo, en la práctica, esta obligación de conformar el Consejo queda librada a la voluntad de cada Dirección. Por otra parte, se hace necesario estudiar ambas figuras para encontrar una vía que considere tanto las necesidades del centro educativo como el derecho a la participación de las familias, los estudiantes y la comunidad. El último reglamento de Comisión Fomento Escolar que establece los fines, funcionamiento, estatus jurídico, entre otras cuestiones, fue aprobado en el año 2004, quedando desactualizado con la aprobación de la Ley General de Educación que tiene mayor jerarquía jurídica.
En tanto nos sentimos protagonistas y necesariamente implicados, sin desconocer el desafío que supone comprender el complejo entramado que conforma nuestra comunidad educativa,quisiéramos se nos reconozca como un actor que quiere participar, e incidir en una forma de hacer escuela.
Necesitamos, además de mejorar los edificios escolares, incluir la participación efectiva y la decisión de niños y niñas en nuestros centros educativos, de los vecinos y de otras organizaciones públicas y privadas que conforman el tejido social de nuestros barrios y comunidades. Todos los actores deben de participar del proyecto institucional, porque la escuela está inserta en un barrio, en una comunidad, en un contexto socio cultural donde viven y crecen niños y niñas. ¡Ellos y ellas, deben decidir también! Fortalecer y profundizar la democracia requiere una participación real y genuina. Participar es también tomar decisiones. Montevideo, 27 de mayo de 2019.
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